Reportaje
La anestesia es la perdida transitoria de las sensaciones (dolor, temperatura, postura, vibración y tacto) en parte o en todo el cuerpoA pesar de lo poco que se conoce sobre este método, que nos hace insensible al dolor y facilita el trabajo de los médicos, es uno de los avances más importantes en el campo de la medicina y base de toda intervención quirúrgica.
Esta depresión progresiva y reversible del Sistema Nervioso Central causa un temor en los pacientes a ser sometidos a procedimientos quirúrgicos, terapéuticos o diagnósticos, quizás por el miedo de no despertar o que suceda algo inesperado, es decir por sus riegos.
Por Linda Valdez Zambrano
SANTO DOMINGO-“El miedo hacia la anestesia es producto de la historia, ya que antes los métodos utilizados para evitar el dolor eran salvajes, pero con los avances en la anestesiología y los nuevos medicamentos se han disminuido los riegos”, expresó Ramón Oscar Martínez, anestesiólogo del Hospital José J. Mañon y del Hospital Juan Pablo Pina en San Cristóbal.
En cambio, el profesor adjunto de la cátedra de Anestesiología de la Universidad Autónoma de Santo Domingo y doctor del Hospital Darío Contreras, Rafael Hernández Polanco dijo que los anestésicos actúan no sólo en las células cerebrales, sino en todas las células del organismo, aunque los efectos son mayores en el cerebro. El sitio exacto de actuación de los anestésicos, explicó Hernández, no está bien definido, sin embargo se cree que sus efectos se deben a la interferencia en la transmisión celular.
A causa de las posibles consecuencias de su uso, el anestesiólogo debe examinar el estado general del paciente (respiración, hemoglobina, enfermedades, hora del último alimento, operaciones anteriores, alergia a un medicamento, entre otras) antes de la intervención.
“Si el paciente sufre de alcoholismo, tabaquismo o drogadicción, pueden aumentar los riegos, para un paciente alcohólico la dosis requerida será mayor, mientras que el tabaco reduce la duración del fármaco y puede afectar la respiración”, afirmó Hernández Polanco.
Según el ginecólogo y ex-director del Hospital Juan Pablo Pina, Fernando Valdez, el ayuno es importante, puesto que el contenido gástrico podría dirigirse a la laringe en caso de vomito y de allí pasar a los pulmones, produciendo una broncoaspiración, la cual se caracteriza por una neumonitis (inflamación de los pulmones) y una infección que puede ocasionar la muerte si no se trata a tiempo.
Los posibles resultados de los anestésicos endovenosos son: depresión, problemas respiratorios, disminución de la presión arterial, vomito, escalofríos, temblores, dolor de cabeza, complicaciones neurológicas, entre otras. De los anestésicos inhalatorios como el éter son: Depresión cerebral, leve depresión de la respiración, náuseas, vomito, relajación de los músculos, entre otras.
Tipos de anestesias
Existen dos tipos de anestesias: la regional, que es la que bloquea la conducción de impulsos dolorosos al ser inyectada cerca de la lesión como la raquídea (columna), y la general que es aquella en la que se duerme todo el cuerpo a través de la administración de fármacos vía intravenosa o inhalatoria.
Ramón Martínez aseguró que la anestesia regional es de más fácil administración y posee menor índice de mortalidad que la general. Ésta empezó a usarse unos veinte años después que la general, informó el especialista.
Los anestésicos locales pueden aplicarse por instilación, aplicación tópica, infiltración bloqueo troncular y por vía endovenosa.
El tipo de anestesia a emplear dependerá del tipo de procedimiento quirúrgico, la zona a operar, el estado de salud previo o la elección del paciente.
No obstante, se suele confundir los términos de analgesia y anestesia. La analgesia consiste en la perdida del dolor y no de la conciencia, mientras que la anestesia es la perdida no sólo del dolor, sino de todas las sensaciones y de la conciencia.
Técnicas utilizadas en caso de emergencias
Uno de los conocimientos que debe tener el anestesiólogo es sobre la intubación de la traquea que es la colocación de un tubo en este órgano por medio de la boca o la nariz, con el fin de dar respiración asistida en caso de paros respiratorios, expansión de la anestesia raquídea en áreas superiores y uso de la anestesia general.
El doctor Valdez expresó que el conocimiento de esta técnica debe ser del dominio no sólo del anestesiólogo, sino también del cirujano, médico general o enfermera, pues en muchas ocasiones la vida del paciente dependerá de cuán rápido se le inserte el tubo en la tráquea.
Otra técnica a utilizar en caso de emergencia, es la resucitación cardiorrespiratoria que es el proceso que sirve para contrarrestar un paro cardiorrespiratorio por la obstrucción de las vías respiratorias, traumas cerebrales, enfermedades pulmonares o por baja tensión de oxigeno.
Para llevar oxígeno a los pulmones se recurre a la respiración boca a boca, al método manual, moviendo del cuerpo para ampliar la caja torácica y el método mecánico.
Después de realizada la cirugía el paciente puede presentar complicaciones por lo que el cuidado en las primeras horas debe ser permanente y posteriormente se lleva a la persona a la recuperación paulatina de su conciencia, resaltó el doctor Martínez.
Como dijo el profesor adjunto de la cátedra de Anestesiología de UASD: “La anestesia es un instrumento que contribuye al desarrollo de la medicina y facilita la labor de los especialistas. Por lo tanto, debemos confiar en los médicos y eliminar los miedos o mitos sobre la columna de la cirugía, la Anestesia”
Insert:
El anestesiólogo es un médico que completó una carrera de 6 años en Medicina-Cirugía y un período de especialidad de 4 años, que incluye la formación en Anestesiología, Reanimación y Tratamiento del dolor.
La anestesiología es la rama de la medicina que se ocupa de las intervenciones quirúrgicas y de la relajación a través de los fármacos, restando el funcionamiento físico y celular.
Complemento:
El concepto mágico-religioso era determinante en el inicio de la medicina en la República Dominicana, puesto que el curandero era el encargado de preservar la salud de los demás. Sin embargo, en 1517 se fundó la Universidad Santo Tomás de Aquino y se abrió la facultad de Medicina en 1687.
La primera cirugía oftálmica se realizó en 1844 y se utilizó como anestésico la morfina. Posteriormente, en 1861 se implementó el cloroformo y el ombredane un aparato para administrar el éter.
La anestesia raquídea se empezó a usar en 1916 por el doctor Arturo Grullón en el Hospital San Antonio, actualmente llamado Luís Eduardo Aybar. También, uno de los primeros anestésicos locales fue la novocaína.
Entre los pioneros de la anestesiología moderna en el país se encuentran: Octavio Marmolejos, Humberto Hernández, Manuel Durán y Nadim Aude Núñez. Éstos implementaron sus conocimientos en la década de 1950 después de haber adquirido una preparación en Cuba, Argentina, Puerto Rico y Estados Unidos. Octavio Marmolejos es el propulsor de la especialidad de Anestesiología en la República Dominicana.